El trauma puede provenir de muchas fuentes
El trauma puede provenir de un acontecimiento significativo o de experiencias angustiosas continuas.
Puede ser algo que uno mismo experimente, algo que haya presenciado o algo de lo que haya oído hablar.
Nuestro bienestar emocional está ligado a nuestra genética, nuestra historia familiar y nuestras experiencias diarias.
Cuando tenemos experiencias muy angustiosas o perturbadoras, pueden tener efectos negativos duraderos en nuestro cuerpo y nuestra mente mucho después de que estos eventos hayan terminado.
Estas experiencias se conocen como traumas.
El trauma puede provenir de un acontecimiento significativo o de experiencias angustiosas continuas.
Puede ser algo que uno mismo experimente, algo que haya presenciado o algo de lo que haya oído hablar.
Si sientes síntomas, es probable que tu hijo/a también los sienta. La angustia emocional es especialmente dura para los niños/as.
La resiliencia es la capacidad de responder a los acontecimientos difíciles de una manera saludable. Nos permite perseverar en los momentos difíciles sin dejar de reconocer nuestros sentimientos y cuidar nuestro bienestar emocional.
Si damos prioridad al bienestar mental, creamos espacios en los que sea seguro hablar del trauma, y buscamos apoyo, ayudamos a crear una comunidad que normalice el cuidado de nuestras mentes y el desarrollo de la resiliencia.
Saber cuándo buscar apoyo para uno mismo o para un hijo/a es una demostración de fortaleza. La campaña ¿Estás bien? ha sido creada para ponerte en contacto con el apoyo que necesitas, ¡cuando lo necesites!